El mundo, Chile y las recientes elecciones nos muestran, una vez más, que las situaciones imprevistas se multiplican. La incertidumbre, a la cual debemos perderle el miedo, implica que cada vez tenemos menos seguridad en que las acciones que tomamos nos llevarán con certeza a un camino deseado. En este contexto de ganadores y perdedores y donde todos querrán pasarle la cuenta a otro, se hace necesario que todos los sectores nos hagamos cargo de esta realidad. Tenemos que liderar a través de diferentes generaciones, inspirar a otros sobre visiones del futuro, crear consensos y compromisos. Estamos frente a nueva encrucijada, de eso no hay duda. Que Chile ha avanzado en entregarles a sus ciudadanos una mejor calidad de vida tampoco. La mirada país de los próximos 20 años requiere observar y entender este contexto, porque los chilenos queremos mejores pensiones, mejor educación, mejor salud y una vida más segura. Y entre todos debemos ser capaces de lograrlo.