Desde la intuición

sábado, 18 de noviembre de 2017
Texto Jimena Silva Cubillos
Taller por taller
El Mercurio

A simple vista podrían ser piezas de arte o de diseño. Pero no, estas casitas hechas por el fotógrafo profesional Francisco Soto son, según él, solo un objeto decorativo, simple y original, indirectamente una reinterpretación contemporánea de las casas de Valparaíso, lugar donde tiene un taller y tienda de recuerdos.

Encontrar un objeto que pudiera llenar un espacio vacío de su tienda, algo que fuera decorativo y que no importara si se ensuciase o no, o, si eso pasara, fuera fácil de limpiar. Ese fue el punto de partida de las encantadoras casitas que desde hace un año elabora cien por ciento a mano el artista visual Francisco Soto (38).

Formado en la Escuela de Foto Arte, y con estudios de danza, teatro e ilustración, este fotógrafo nacido en Santiago vive y trabaja como independiente desde hace 13 años en Valparaíso, lugar donde hace seis armó una tienda de recuerdos para vender exclusivamente creaciones suyas y de su novia, la arquitecta María José Espinoza. Además de fotografías y postales de paisajes emblemáticos de Chile, libretas, tazones, estampillas y tarjetas y sobres ilustrados, hoy en Valpostal (Urriola 678, Cerro Alegre. Instagram: @valpostal) ofrece una gran variedad de casas de pequeño formato elaboradas a partir de un solo bloque de madera de demolición.

-Empecé por casualidad, buscando poder poner algo en la parte de abajo de la tienda, que siempre se llena de polvo. Probé hartas cosas, pero nada resultó. Hasta que, mirando ideas en internet y conversando con un amigo restaurador que tiene un taller de madera, se me ocurrió hacer estas casas, un objeto simple, decorativo y original. No son más que pequeños pedazos de maderas tridimensionales, provenientes de puertas y ventanas de construcciones antiguas del puerto -explica Francisco (podriasveniraverme@gmail.com), quien usa principalmente roble, pino oregón, raulí y alerce.

-La forma se dio sola; lo único que hago es cortar las maderas, pintar la puerta y las ventanas, y acomodar un clavo que sirve de chimenea. Los colores, matices y craquelados son propios del material, las pifias del paso del tiempo, la historia de las maderas -comenta este artista que entre el 18 y 23 de diciembre expondrá su trabajo en la feria "Manos Maestras", en los jardines del Palacio Carrasco, en la ciudad de Viña del Mar.

Texto, Jimena Silva Cubillos. Fotografías, gentileza Francisco Soto.