Las dueñas del restaurante Ambrosía, de Providencia, afirmaron en una carta publicada en "El Mercurio" que debieron enfrentar una larga espera para tramitar la patente de alcoholes de su local. Ayer, luego de más de siete meses, el municipio les otorgó el permiso, según Rosario Onetto, una de las propietarias. La Asociación Chilena de Gastronomía sostuvo que las demoras son comunes y desincentivan a los emprendedores.