El distanciamiento de 5,5% existente entre el precio del dólar de mercado, que está entre $625 y $630 y el tipo de cambio real de equilibrio que la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) calcula en un rango entre $667 y $670 por dólar, pone de manifiesto una tensión en el mercado cambiario. Esto, según un análisis del gremio, resta competitividad a los sectores exportadores. Tras alcanzar un máximo de $722 por dólar en enero de 2016, la paridad cambiaria descendió hasta un promedio de $643 por dólar en agosto de este año y en las últimas tres semanas aceleró su declinación en casi $30. Lo anterior ha contribuido a frenar la trayectoria inflacionaria y a apuntalar el consumo privado de bienes durables, en un contexto de fuerte desaceleración de la economía, señala el informe. La actual caída del dólar no define por sí sola la competitividad externa desde el punto de vista sectorial, debido a que se conjugan otros elementos como los precios de exportación de los productos. Para identificar el tipo de cambio real que corresponde a cada actividad exportadora, la CCS considera el tipo de cambio spot o de mercado, los costos internos y el comportamiento de los precios internacionales de los productos por cada sector individual. Los antecedentes analizados indican que, pese a la recuperación de los precios internacionales, la canasta exportadora muestra un retroceso competitivo en relación con el primer trimestre, cuando la paridad alcanzaba del orden de $660. Entre los productos que han visto un deterioro en su competitividad porque su tipo de cambio para operar en equilibrio de largo plazo es mayor al que hoy se observa en el mercado, están: madera aserrada, cuyo tipo cambio sectorial actual es de $650; chips de madera ($676); madera aserrada ($650); productos industriales en general ($638); productos frutícolas ($696), celulosa y papel ($705), la industria metálica ($740) y productos químicos ($788).