escaparon de una prisión de las Islas Vírgenes británicas tras el huracán Irma y suponen una "grave amenaza" para el mantenimiento de la ley y el orden, anunció ayer el ministro de Estado del Ministerio de Relaciones Exteriores y la Commonwealth, Alan Duncan, en declaraciones al Parlamento. Infantes de marina británicos fueron desplegados el viernes para proteger al gobernador y garantizar el mantenimiento de la ley y el orden y recibieron significativos refuerzos durante el fin de semana, consignó DPA. Hay unos 1.000 militares británicos desplegados en el Caribe.