domingo, 10 de septiembre de 2017
Carlos Saldivia
El Mercurio
Definido como un equipo de acompañamiento estratégico, tienen alta sintonía y cercanía personal con el abanderado, a quien conocieron mucho antes de iniciar su aventura presidencial. Desde los temas ejes de la campaña hasta eventuales salidas internacionales han sido parte de sus análisis, así como el episodio de la asesoría legislativa cuestionada.
Un "petit comité" conformado por Juan Forch, Harold Correa (PPD), Luis Conejeros (ex DC), Enrique Soler (PPD) y Osvaldo Rosales (ex PPD) se reunió hace 15 días (hasta hora, la última de sus citas) en un apacible café de Providencia y Luis Thayer Ojeda. El tema del cónclave era cómo enfocar la campaña del candidato de Fuerza de Mayoría, Alejandro Guillier, en los meses de septiembre y octubre. En el encuentro coincidieron en la necesidad de resaltar tres puntos: empleo, crecimiento y protección social. Y, junto con ello, acuñar como concepto la idea de que el crecimiento económico no puede ser "a todo evento" ni a costa de "generar un daño" a la ciudadanía. Esto último, apuntando a enfrentar al candidato de Chile Vamos, Sebastián Piñera, en el área que mejor domina. En el comando guillierista se preocupan de resaltar que el grupo no es un "comando paralelo", pues no tiene estructura territorial ni maneja máquinas partidarias. En cambio, lo definen como un equipo de acompañamiento estratégico que resuelve requerimientos específicos del candidato. No obstante, a regañadientes, tanto en el comando como en los partidos que sustentan al abanderado, reconocen que el "petit comité" es también el grupo que mayor sintonía tiene con el candidato a la hora de definir contenidos, respuestas mediáticas y materias ligadas a lo ciudadano, un aspecto especialmente relevante para él. Esta semana el equipo cobró especial notoriedad luego de que uno de los asesores legislativos de Guillier, Omar Beltrán, fuera acusado de hacer "copy paste" en el Senado, por lo cual su jefe de gabinete, Enrique Soler, fue cuestionado en los partidos, y además salió al tapete el nombre de Harold Correa (una de las figuras de la G-90 del PPD y cercano al ex ministro Rodrigo Peñailillo), quien tiene una comunidad de techo con Beltrán. Desde el encuentro de fines de agosto, el grupo no ha vuelto a juntarse, pero se mantienen coordinados por teléfono, email y WhatsApp. Les dicen la "brigada Andrés Bello" y comenzaron a reunirse este año Los integrantes de este equipo comenzaron a reunirse en el departamento de Juan Forch (ex PC), ubicado en Avenida Andrés Bello, a comienzos de año. El nombre de la calle motivó a algunos a "bautizarlos" con el nombre del primer rector de la Universidad de Chile. Forch -también periodista y cercano al ex director de la Secom Germán Berger- lidera el equipo estratégico, de imagen y propaganda del abanderado. Se coordina usualmente con Juan Andrés Lagos (PC, jefe de comunicaciones del comando), y es considerado el autor del eslogan "Guillier, el Presidente de la gente" y del logo tricolor, así como de grafemas similares a los que se usaron en la campaña de Bachelet en 2013. "Colaboro con Alejandro porque es mi amigo y esa es mi tarea. Tiene dos o tres amigos que hacemos lo mismo", explicó en julio a La Segunda. Forch se coordina con el generalísimo del comando, el secretario general del PR, Osvaldo Correa, para canalizar las impresiones del comité y dar ideas fuerza. De la DC y de la G-90 al guillierismo Conejeros -hijo del también periodista Senén Conejeros- asumió hace tres semanas como nuevo jefe de prensa del comando. En junio pasado había renunciado a su militancia en la DC, luego de 20 años en la colectividad que lidera la también candidata Carolina Goic. Conejeros fue alumno de Guillier en la Universidad Diego Portales (UDP) a mediados de los años 90, y en 2006 sucedió al legislador como presidente del Colegio de Periodistas. "Desde entonces han mantenido una relación colaborativa", manifiestan desde el guillierismo. Correa, en tanto, conoció a Guillier como jefe de gabinete de Sergio Bitar, cuando este era ministro de Educación, en 2005. En esa época Bitar invitó a Guillier a participar ad honorem de una campaña en favor de los derechos del niño en la educación escolar. Según ha contado el ex secretario de Estado de Ricardo Lagos, se le pidió al entonces rostro de TV visitar comunas pobres al sur de Santiago por la credibilidad que tenía como lector de noticias. Bitar y Harold Correa le habrían presentado, a su vez, al ex diplomático Enrique Soler, su actual jefe de gabinete. El trío mantenía especial interés por los temas internacionales en momentos en que Guillier hacía comentarios de política regional en radio. Bitar, Correa y Soler fueron parte de la comisión internacional del PPD. Por su parte Soler, habría conocido a Forch, en sus años como diplomático en Perú. A las reuniones en el departamento de Juan Forch, también suele ir Guillier, especialmente cuando deben definir estrategias de mediano plazo para la campaña. Asimismo, hasta el inmueble de Andrés Bello ha concurrido Juan Andrés Lagos quien es también uno de los encargados de las negociaciones parlamentarias de los comunistas. Evalúan conveniencia de giras al exterior Hace algunas semanas, en una de esas reuniones, el "petit comité" le planteó al aspirante a La Moneda que buscara puntos de acercamiento con el senador Guido Girardi. Ello, considerando que el parlamentario del PPD compartía la idea de que esta debía ser "una campaña ciudadana, donde la política y sus temas estén al servicio de los electores". En esta línea, explican en el PPD que la próxima semana podrían reunirse Girardi con el abanderado. Asimismo, en los últimos días, el "petit comité" comenzó -por teléfono y vía mensajes- a debatir un nuevo tema: la agenda internacional del abanderado. A pesar de que desde el PR se recomendaba un viaje a Francia, y otro a Perú y Ecuador, el senador recibió hace unos días una invitación de una institución académica en Estados Unidos para realizar una charla. Ello ha abierto el debate de si es conveniente aceptarla o si es mejor concentrarse en la realidad local. Las relaciones con los partidos y el comando En el PPD afirman que son varios los motivos por los cuales el círculo más cercano a Guillier ha recomendado un acercamiento a Girardi. Principalmente -explican- porque el presidente del partido, Gonzalo Navarrete, y el experto electoral René Jofré han sido críticos del rol de Soler y Harold Correa en el "petit Comité". De hecho, Navarrete le expresó su molestia al generalísimo del comando Osvaldo Correa, porque hubiera una especie de "comando paralelo" y le recordó que Harold Correa no estaba en las listas que la tienda había presentado a Guillier para formar sus equipos. Asimismo, Jofré había expresado en instancias del partido que Soler no tenía experiencia en campañas políticas, al igual que Rosales. Una crítica que también ha sido expresada en la mesa del Partido Radical y en almuerzos de bancada. En cambio, en lo que todos coinciden es en su convencimiento de que el candidato sufrirá durante los próximos 60 días intentos por dañar su credibilidad, "que es su principal atributo político". Y dentro de esas amenazas insisten en ubicar las acusaciones contra Beltrán. Por ello, tanto en el comando presidencial como en el "grupo de acompañamiento" se definió que fuera el Senado, como corporación, el que descartara mediante una indagación cualquier irregularidad en los informes. De allí la solicitud formulada por el candidato para que, pese a no corresponderle, sus contratos y pagos sean auditados este año, y que luego la comisión de Ética se pronuncie sobre sus actuaciones. El comando de Guillier inció un trabajo de contenidos en materias antidelincuencia donde participará el ex subsecretario de Prevensión del Delito, Antonio Frey (PPD).
