El viernes Drake Enterprises -la firma desde la que Nicolás Ibáñez está gestionando sus inversiones-, envió una carta a varias autoridades y representantes del sector lechero y agroindustrial de Chile. A través de la misiva la firma quiso explicar las razones por las que está ampliando su presencia en el rubro lechero, luego de que esta semana concretara su ingreso a la propiedad de la firma láctea Manuka, de capitales neozelandeses. En el documento, fuera de explicar sus orígenes en la industria agroalimentaria en 2004, con Lácteos Tronador, Drake se refiere a Nueva Zelandia, a su sector lechero y al país en general, indicando que "debe constituir una fuente de inspiración para Chile". "Vemos a Nueva Zelandia como un ejemplo de una sociedad integrada, más avanzada que la chilena, que ha logrado elevados niveles de movilidad y cohesión social. Su sector lácteo, que se desarrolla en casi las mismas condiciones geográficas que el de nuestro país, les ha abierto posibilidades de superación personal a miles de familias emergentes. Por ello es que sostenemos que esta nación oceánica puede llegar a representar el mismo ejemplo que ya constituye Noruega para el desarrollo de la acuicultura, California para la fruticultura y Francia para la industria vitivinícola", señala la misiva de tres carillas, que está firmado por el director de Drake, Alberto Eguiguren. El documento lo enviaron a 17 destinatarios, entre los que se cuentan el ministro de Agricultura, Carlos Furche; el presidente de la SNA, Ricardo Ariztía; los gerentes de firmas como Watts, Soprole y Nestlé, y varios representantes de asociaciones gremiales, como Aproleche, Fedeleche y Sago.