Señor Director:
La imagen de algunos partidarios de la ley de aborto celebrando en la calle la decisión del Tribunal Constitucional con botellas de espumante me produjo una impresión de una falta de humanidad y compasión que no puedo más que calificar como escalofriante. Para que luego nos digan que no hay nadie a favor del aborto y que no lo considere una tragedia.
Un Chile en que se celebra la muerte de inocentes con patrocinio estatal simplemente ha dejado de ser "asilo contra la opresión".
Andrés Schlack