El Presidente de EE.UU., Donald Trump, volvió ayer a generar revuelo al calificar de "triste" la retirada de monumentos vinculados a la simbología confederada, defendidos por grupos supremacistas blancos, tras el atentado racista del fin de semana en Charlottesville (Virginia), donde murió una manifestante antifascista. "Es triste ver la historia y la cultura de nuestro gran país siendo destrozadas con la eliminación de nuestras hermosas estatuas y monumentos. No puedes cambiar la historia, pero puedes aprender de ella. Robert E. Lee, Stonewall Jackson - ¿quién será el siguiente, Washington, Jefferson? ¡Tan tonto!," consideró Trump en Twitter avivando la polémica.