La lucha contra la extracción ilegal y masiva de "huiros" en la costa de la zona norte del país llevó al Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) a realizar amplios operativos, que permitieron incautar en apenas cinco días un total de 19,5 toneladas de algas en las regiones nortinas de Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo. Los operativos se insertan en el trabajo del Comité de Fiscalización Interinstitucional, en que además participan Carabineros, PDI, la Armada y el Servicio de Impuestos Internos, entre otros servicios. El corte y extracción de raíz del recurso en el fondo del mar, mediante el llamado "barreteo" (se utiliza un chuzo), impacta en el ecosistema marino, al extinguir praderas naturales donde se reproduce parte importante de los recursos pesqueros del país. Las algas se exportan principalmente a Japón, China y Francia, donde se utilizan como espesantes alimenticios, en cosméticos, fármacos y comida para animales y moluscos.