De Bulgaria viene la mayoría de los clonadores que tratan de entrar a Chile
sábado, 22 de julio de 2017
José Joaquín Suzuki
Nacional
El Mercurio
Informe de la policía civil detalla que ucranianos, colombianos y venezolanos también intentan ingresar para cometer este ilícito.
Ocho búlgaros y un francés son los ciudadanos que integraban cuatro bandas distintas de clonadores de tarjetas que operaban en el país y que fueron desarticuladas por el Departamento de Inspección Secundaria de la Policía de Investigaciones (PDI) entre el 2016 y hasta junio de este año. Esto según un informe de la policía civil elaborado por la Prefectura Aeropuerto de la Jefatura Nacional de Extranjería. En el documento, también se señala que -en los últimos tres años- se ha impedido que ingresen al país 32 extranjeros que fueron sorprendidos portando elementos para cometer estos ilícitos. De esos, dice el estudio, "observamos un dominio por parte de los nacionales de Bulgaria con un 31%, seguidos por los ucranianos con un 25%, un poco más atrás los colombianos con un 19% y los venezolanos con un 10%". Esto ha variado año a año: si bien en 2015 predominaron los ucranianos -con 50%- el año pasado fueron los búlgaros, con 48%. Pero, entre enero y junio, los venezolanos son quienes lideran la lista, con 60%. Sobre este cambio, el prefecto Bernardino Cárdenas, jefe de Policía Internacional del aeropuerto, explica que se debe a que "hay contacto entre ellos, traspaso de información de estas bandas" para evitar que pretendan ingresar al país por tener mayor seguridad en el aeropuerto. Este cambio también se demuestra en que en junio pasado, se detectó a una banda integrada por tres venezolanos que viajaban a Chile con elementos para realizar clonaciones de tarjetas, como tarjetas y skimmers . Cuando pasaron por migración fueron devueltos a Perú, desde donde venían, y debido a la coordinación con Interpol, fueron detenidos en el aeropuerto Jorge Chávez de Lima y puestos a disposición de la justicia. "Ellos iniciaron una investigación con toda la evidencia que iba en su equipaje facturado que había salido de Perú", dice el subprefecto Cárdenas. El documento también hace un análisis sobre el perjuicio que generaron las bandas de clonación en Chile, que lo cifran en $126 millones desde 2016, obteniendo cada miembro cerca de $15 millones, en promedio. Según comenta el oficial de la PDI, "hicimos una media de cuanto era el botín que estas bandas internacionales obtenían en Chile".
La mayoría de los extranjeros que intentan ingresar al país para clonar tarjetas tiene entre 30 y 39 años.
