Una querella criminal interpuso ayer en el juzgado de Jaca, cabecera del Poder Judicial en la zona, el porteño Manuel Briones Sanz por los maltratos que llevaron a la muerte a su hija biológica Naiara, de 8 años, ocurrida en el pueblo español de Sabiñánigo (Huesca) el jueves antepasado. Briones llegó a ese país el martes y junto a su abogado Marcos García interpuso la acción legal no solo contra el presunto autor confeso del homicidio, Iván Pardo, tío político de la víctima. También apuntó a la madre de éste, Nieves Pena, y a las dos nietas de esta, de 15 y 12 años de edad, además de su propia ex pareja, Mariela Benítez. "Madres de ex compañeras de Naiara y desde un grupo llamado 'mamás en el extranjero' (de WhatsApp, al que pertenecía Mariela Benítez) me cuentan que el padrastro, el tío y la abuela política maltrataban a Naiara. Esta trataba a mi hija de 'sudaca' y de 'negra'. Todo el bullying del que decían era objeto mi hija en el colegio, lo practicaban ellos", relató telefónicamente Manuel Briones a "El Mercurio", quien acusa a su ex mujer de encubrirlos. La acción legal contra las dos menores busca aclarar si fueron partícipes de los hechos.