miércoles, 07 de noviembre de 2007
EFE
Fuentes de la empresa señalaron que la situación tenderá a normalizarse "en un mes", cuando Aerolíneas Argentinas y Austral, su subsidiaria para vuelos locales, vuelvan a contar con su dotación completa de pilotos.
BUENOS AIRES.- Nuevas demoras afectaban hoy a los pasajeros de Aerolíneas Argentinas en el aeropuerto para vuelos locales de Buenos Aires, después de que la compañía del grupo español Marsans redujera el 30% sus frecuencias semanales para normalizar el cumplimiento de licencias de los pilotos.
Fuentes de la empresa señalaron a Efe que la situación tenderá a normalizarse "en un mes", cuando Aerolíneas Argentinas y Austral, su subsidiaria para vuelos locales, vuelvan a contar con su dotación completa de pilotos.
"Hoy no podemos prestar el servicio como lo veníamos haciendo. Una vez que los pilotos se tomen los días que le corresponden podremos regularizar la situación", declaró a medios locales el gerente de Asuntos Corporativos de la compañía, Jorge Molina, al explicar la reducción de las 177 frecuencias semanales a 124.
Desde la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) la versión fue diferente.
"Hay pilotos suficientes para cumplir los vuelos que se venían haciendo. Como mucho, de vacaciones debe haber unos 30. Es una vergüenza que un grupo que administra una línea de bandera cambie abruptamente la frecuencia y reduzca vuelos a capitales y otras ciudades del país", dijo Pablo Biro, vicepresidente de APLA.
Para Biro, "lo que está haciendo la empresa es presionar al Gobierno para obtener mayores beneficios, como subsidios y liberación de tarifas".
Los problemas recrudecieron la semana pasada, cuando Aerolíneas Argentinas se vio obligada a reprogramar vuelos después de que la APLA denunciara incumplimientos en las licencias de los pilotos.
El secretario de Transportes de Argentina, Ricardo Jaime, aseguró hace unos días que "se van a intensificar" las sanciones a Aerolíneas Argentinas por las demoras y cancelaciones de sus vuelos, y dijo que le reclamará que incorpore más aviones y personal para cubrir la demanda.
Desde comienzos de año, miles de argentinos y turistas extranjeros han sufrido múltiples problemas en sus viajes, a causa de seguidillas de huelgas en las aerolíneas, robos de equipajes y fallos en el sistema de radares de los aeropuertos.
En lo que va del año, hubo más de nueve huelgas, tanto de personal de vuelo como el de atención en tierra, que han castigado a argentinos y extranjeros con días de espera e interminables colas.
El aeropuerto internacional de Ezeiza, a las afueras de Buenos Aires y el mayor del país, se sitúa a la cabeza de los hurtos a pasajeros, con uno por día, con lo que la demanda de embalaje de seguridad para los equipajes creció un 50%, según fuentes oficiales.
A la mala gestión que se atribuye a las compañías que operan vuelos regionales en el país (las otras son la chilena Lan-Argentina y Austral, subsidiaria de Aerolíneas Argentinas), se suman casos de sobornos solicitados a los viajeros por parte de funcionarios de aduanas.
