"Estamos viviendo en Brasil nuestra mayor película de terror"
viernes, 19 de mayo de 2017
Amanda Marton Ramaciotti
Internacional
El Mercurio
Para Boris Fausto, esta es una crisis como ninguna otra. El reconocido historiador brasileño, autor de una treintena de libros, dice que está preocupado por la estabilidad de su país y asegura que el problema no es solo moral y criminal, sino que también económico. "Es un momento en el que tenemos muchas más preguntas que respuestas", dijo ayer en conversación con "El Mercurio". -¿Estuvo antes Brasil en una crisis tan profunda como esta? Pareciera que cuando está a punto de recuperarse cae otra vez y así sigue... "No. Con esa complejidad y extensión, no. Estamos viviendo en Brasil nuestra mayor película de terror". -¿Qué podemos esperar de la clase política brasileña? "Todo indica que el Congreso tendrá un papel muy importante. Una de las prioridades hoy más definidas, que creo que terminará concretándose, es la de elección (presidencial) indirecta, o la salida de Temer vía impeachment. Es improbable que el Presidente renuncie. También está la investigación del Supremo Tribunal Electoral, que está analizando la fórmula electoral de Dilma Rousseff y Michel Temer (por presunto financiamiento ilegal). Ese caso había perdido fuerza, y se hablaba de analizar el caso de Dilma separado al de Temer, para que él pudiera terminar el mandato. Era muy probable que hubiera una absolución. Ahora todo cambió. Nadie sabe". -¿Temer irá a juicio político? Dilma cayó por mucho menos... "Creo que no hay escapatoria. Ya sea vía impeachment u otra forma. Pese a que aún no tenemos los audios que involucran a Temer (no son públicos aún), es muy difícil que esto sea una fantasía". -Pensando en las presidenciales de 2018: ¿el PSDB debería dejar el gobierno para protegerse? "No sabemos qué gobierno existirá de aquí al próximo año. Se dice, por ejemplo, que el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, no asumiría el poder; que el jefe del Senado, Eunício Oliveira, tampoco. En ese caso, la presidencia del país iría a Carmen Lúcia (Antunes), presidenta del Supremo Tribunal Federal. Entonces no sabemos bien cómo marcharán los acontecimientos. No sé si (el PSDB) debería salir corriendo (del gobierno)". -Cualquier gobierno que asuma solo durará hasta el 31 de diciembre de 2018... "El punto crucial en todo esto es que los problemas no son solo morales, son criminales, y además está el factor económico. No hay cómo negar que el gobierno de Temer estaba teniendo éxito en el área económica. Entonces, uno se pregunta qué ocurrirá con las reformas al sistema de pensiones y laboral, qué pasará con la caída de los intereses, con la caída de la inflación que es muy pronunciada. Hay un programa económico en marcha que contrasta mucho con las confusiones en el plan político. ¿Será posible preservar ese programa? ¿Será posible contar con el apoyo del Congreso para aprobar esas medidas? Es un momento en el que tenemos muchas más preguntas que respuestas". -Independientemente de lo económico, la sociedad parece estar desesperanzada. Ya el miércoles miles salieron a las calles nuevamente a protestar... "Mi sensación personal es de espanto ante todo lo que está ocurriendo. Las revelaciones del miércoles son aterradoras, terribles. Como lo dices, ayer (miércoles) se convocaron manifestaciones muy rápidamente, y hoy (jueves) muchos volverán a salir a las calles. Los movimientos ganaron un gran impulso, sobre todo los opositores. Pero quienes se preocupan, como yo, por la estabilidad del país, solo pueden lamentar toda esta situación, que es muy triste y muy complicada". -Las manifestaciones de 2015 y 2016, la insatisfacción popular, alentaron que el Congreso votara a favor del impeachment de Rousseff. ¿Si la población vuelve ahora con esa fuerza a las calles, las Cámaras favorecerán la salida de Temer? "Sin duda. El Congreso reaccionará de la mano a lo que ocurra en las calles".
