El peso de Estados Unidos, la primera economía global, y de su Presidente Donald Trump -quien ha amenazado con imponer barreras comerciales y renegociar acuerdos- se dejaron sentir en la asamblea del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial que terminó ayer sin un compromiso de luchar contra el proteccionismo, pese a que lo habían prometido anteriormente. "El significado de la palabra proteccionismo es muy ambiguo y, por eso, lo hemos eliminado del comunicado", explicó a la prensa el presidente del Comité Financiero y Monetario del FMI, Agustín Carstens. Algo similar ocurrió en la cumbre del G20 en la que Alemania, que ocupa la presidencia rotatoria del grupo, decidió no emitir un comunicado.