Las acciones chinas cerraron con un leve avance el jueves, pese a una caída en los valores tipo B de Shanghai en medio de las preocupaciones sobre una liquidez reducida y una regulación más estricta.
El referencial CSI300 de las principales acciones que cotizan en Shanghai y Shenzhen subió un 0,4%, a 3.461,98 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghai añadió un 0,1%, a 3.248,55 unidades.
El índice que sigue a los valores tipo B de Shanghai llegó a retroceder hasta un 3,9% en la sesión antes de cerrar con una baja de un 1,7%, registrando su peor día en dos meses.