A 24 horas de dejar sus cargos en las testeras del Congreso, los presidentes del Senado, Ricardo Lagos Weber (PPD), y de la Cámara, Osvaldo Andrade (PS), liderarán una actividad junto al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, en la que presentarán la creación de un Consejo Asesor Presidencial para reajustar las remuneraciones de las altas autoridades de gobierno, además de los parlamentarios. "Se trata de poner fin a algo que la ciudadanía ve como un privilegio", comentó en días pasados Andrade. La percepción del diputado apunta a que precisamente los parlamentarios se ven beneficiados del reajuste al sector público que es aprobado por el Congreso, por lo que se busca evitar que actúen como incumbentes en algo que les favorece. De esta manera, será la Presidenta quien fijará el monto del reajuste de remuneraciones de altas autoridades y el Congreso, resolución que no influirá en el grueso de los funcionarios públicos, quienes verán incrementados sus sueldos por el tradicional proyecto de ley que el Ejecutivo envía al Parlamento antes del fin de cada año. Para efectos de aplicar el reajuste, la propuesta "no podrá ser superior al reajuste general de remuneraciones que la última ley respectiva conceda a los trabajadores del sector público. Por su parte, el Presidente de la República solo podrá acoger o reducir el reajuste propuesto por el consejo", y no elevarla.