domingo, 05 de febrero de 2017
C.Agurto y C.Miranda.
El_Mercurio
Fue una compleja semana para Rodrigo Valdés, quien debió sacar la calculadora para estimar los costos de la catástrofe, justo cuando está negociando un acuerdo por pensiones y monitorea los efectos macroeconómicos de un eventual paro en Escondida.
Los incendios que han afectado a la zona centro-sur del país en las últimas tres semanas han mantenido ocupado al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés. La vorágine en la que se ha visto envuelto en estos días le impide saber hasta hoy si irá de vacaciones a Brasil junto a su familia a partir de este martes 7, como tenía planificado antes de que comenzara una de las mayores tragedias que han asolado al país. La serie de actividades que ha realizado en los últimos días, que incluyen visitas a las regiones en emergencia, reuniones con representantes de los sectores económicos afectados, el cálculo de los costos que tendrá para las alicaídas arcas fiscales el proceso de normalización y reconstrucción en la zona -en paralelo a las conversaciones que ha sostenido con diversos actores por la reforma al sistema de pensiones-, ha copado la agenda del jefe de la billetera fiscal. De hecho, esta entrevista se realizó en dos capítulos. El primero, el jueves al mediodía, luego de reunirse con los representantes del Frente Amplio -conglomerado de partidos de izquierda fuera de la Nueva Mayoría- para entregarles detalles de las negociaciones en torno al proyecto para reformar el sistema de pensiones. El segundo, tras dar a conocer la estimación preliminar del gasto fiscal para enfrentar la emergencia y reconstrucción por los incendios. En este último punto, el ministro de Hacienda reconoció que, de los US$ 333 millones anunciados, alrededor de US$ 100 millones serán cubiertos por reasignaciones presupuestarias. Y la mayor parte será financiada con parte de los ahorros del país contenidos en el Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES) junto a saldos de caja en diferentes reparticiones del Estado, que cubrirían los US$ 233 millones restantes. -¿Este es un gasto importante para el fisco considerando la estrechez que enfrenta? "Es un monto de recursos bien significativo cuando uno tiene un presupuesto estrecho. En momentos en que el precio del cobre es US$ 3,5 por libra la situación es bien distinta. Entonces es un esfuerzo que hay que hacer. Por eso incluye reasignaciones y no solo el financiamiento del FEES". -¿Por qué se decide ocupar los fondos del FEES para financiar lo que las reasignaciones no lograrán cubrir? "Porque el presupuesto es bien ajustado. El 2,7% de crecimiento del gasto con que se diseñó el presupuesto esconde una realidad de un aumento del gasto que es importante en algunos ministerios, como Educación o Salud, de los cuales es muy difícil hacer reasignaciones". -¿Pero por qué el uso del FEES y no la emisión de bonos de deuda, por ejemplo? "El FEES es el fondo soberano que está diseñado para apoyar la política fiscal en casos especiales y este es para nosotros un caso especial. Ahora es posible que las emisiones de deuda, si el precio del cobre es muy alto, generen un flujo de caja en que no sea necesario usar demasiado el FEES, pero la directriz inicial es usar saldos de cajas y el FEES". -¿Cuánto es el espacio de tiempo que considera este proceso de reconstrucción? "Depende del tema. La emergencia evidentemente termina muy pronto en términos de su flujo de gastos, aunque también incluye recursos para las tareas aéreas en los próximos meses, en el caso de que hubiese más incendios. Hay cosas como la reconstrucción de casas que, en algunos casos, puede llevar incluso más allá de un año, dependiendo del modelo que se termine adoptando en cada caso particular". -Los gastos en otras catástrofes se han extendido mucho en el tiempo, el caso del 27-F es emblemático porque aún se están destinando fondos para esa reconstrucción... "En este caso, debiese ser este año y probablemente el próximo. La estimación total de US$ 333 millones incluye ambos años". -Estas cifras de gasto no consideran las donaciones que han hecho privados. ¿Hay estimaciones de cuánto han aportado en total? "No tenemos un catastro final. Lo vamos a ir haciendo porque hay muchos mecanismos por los cuales están haciendo donaciones". -Cuando un privado tiene que aportar recursos para traer el SuperTanker, ¿es porque el fisco no tiene esos recursos o es por un problema de gestión del Estado? "En las emergencias usamos los recursos que nos parecen apropiados. Esto no es una restricción que digamos no, no usemos los recursos. En el caso del SuperTanker la verdad es que no estuve muy de cerca del proceso, lo he mirado más bien después, pero tengo la convicción de que la evaluación técnica del uso no era tan precisa y (el funcionamiento del avión) resultó ser mejor de lo que se esperaba". "En segundo lugar, los contratos privados hechos apurados también tienen un problema. Imaginemos que el SuperTanker no hubiera resultado y alguien hubiera decidido pagar no sé cuántos millones de dólares por traerlo. Como funcionarios públicos debemos privilegiar el buen uso de los recursos con la efectividad de ese uso" -Una de las explicaciones de los incendios tiene relación con el cambio climático. ¿Está prevista una mayor incidencia del clima en fenómenos que al país le podrían traer más costos? "Sin duda, hay que pensar bien cómo nos aperamos mejor. Al mismo tiempo, es importante que el mundo privado tenga un rol de autoasegurarse o de tener material para cuidarse. Creo que lo que no podemos hacer es caminar hacia un ordenamiento en que solo es el Estado el responsable". - Ya conocemos los efectos fiscales de la catástrofe. ¿Cuáles son los efectos macroeconómicos? ¿Tiene estimaciones de cuánto el país podría dejar de crecer en el primer trimestre al menos? "Es pronto para tener eso. Sí quiero decir que en el corto plazo el efecto se va a notar, pero no creo que sea significativo y vamos a tener efectos positivos al corto andar por la reconstrucción y también porque hay que cosechar mucha madera que no se quemó completamente. Eso también puede generar algo más de actividad". "La huelga es arma de presión legítima, pero es cara" -Usted admitió que los efectos de los incendios en la actividad económica del país serían menores que los de una huelga en Escondida. ¿Qué tan grave puede ser que se concrete una paralización en la minera? "Escondida es muy importante. Representa prácticamente el 20% de la producción de cobre en Chile. Un mes de paro de Escondida, si no produce nada, significa un Imacec 2 puntos porcentuales más bajo. Si el Imacec iba a ser 1,8%, con Escondida en paro sería -0,2%". -Considerando este efecto, ¿cómo están monitoreando esta situación? "A través de la DT (Dirección del Trabajo). También hemos conversado con distintos actores del tema, pero esto es un problema al final entre privados. Entre el sindicato y la empresa. Esperamos que logren ponerse de acuerdo luego porque el costo económico de esto empieza a ser, desde el punto de vista macroeconómico, bastante relevante". -Esta negociación ha sido muy distinta a las últimas que enfrentó Codelco, en que los bonos fueron bajos y no hubo reajuste. ¿Qué pasa con los trabajadores de sindicatos privados? "No sé, lo que puedo decir es que el trabajo de los sindicatos de Codelco y de los administradores de Codelco fue muy positivo, de mucha conversación, de entender muy bien los problemas de cada uno y de trabajar en equipo al final". -En el caso de Escondida, ¿le parece que el petitorio es irresponsable? "No puedo calificar los petitorios que se hagan a una empresa. Lo que sí puedo esperar es que todos hagan los mayores esfuerzos para converger en un acuerdo. Creo que la huelga es arma de presión legítima, pero es cara". "Tengo opinión de cómo se debe conducir la macroeconomía y se la represento al BC cuando corresponde" -En la presentación del presupuesto 2017, dijo que la política fiscal ya había hecho su tarea y era el momento de que actuara la política monetaria. "No dije eso textualmente..." -Quizás no fue textual, pero fue lo que se entendió. ¿Usted intentó influir en las decisiones del Consejo del BC? "Soy 100% respetuoso de las decisiones del BC, pero también soy un macroeconomista que tengo opinión de cómo se debe conducir la macroeconomía y se la represento al BC cuando corresponde". - ¿ Esperaría que en febrero hubiese una nueva baja? "Voy a apoyarlos en las decisiones que ellos tomen". - Pongámonos en el caso de que no lo haga. ¿Está la opción o se evalúa un plan de estímulo fiscal? "Nosotros tenemos un marco de política macroeconómica en que más allá de que si se baja la tasa o se sube en un mes en particular, tenemos una coordinación monetaria fiscal que funciona y que tenemos que cautelar que funcione". Huelga en Escondida: Nota soberana:
"Un mes de paro significa un Imacec 2 puntos porcentuales más bajo. Si el Imacec iba a ser 1,8%, con Escondida en paro sería -0,2%".
"Cuando a uno lo ponen en una perspectiva negativa, quiere decir que la probabilidad es de más de 50%. Por lo tanto, existe la probabilidad de que baje".
