Los "cazadores" de autos de lujo se toman las calles de Santiago
lunes, 23 de enero de 2017
Matías Vega
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio
Grupos de fanáticos se ubican en sitios específicos del barrio alto para fotografiar los modelos más llamativos. Luego, comparten sus imágenes a través de redes sociales.
Están siempre atentos, listos para disparar. Pueden pasar horas bajo el sol esperando que llegue su presa. No siempre tienen suerte. Pero a veces, de improviso, por la calle pasan rápido modelos de autos únicos en el país, clásicos renovados o de marcas exclusivas. Entonces los car spotters (observadores de autos) apuntan y disparan sus cámaras profesionales. Sus sitios de "caza" son algunos puntos estratégicos del sector oriente de Santiago (ver infografía) y todos los car spotters -fanáticos de todas las edades- los conocen. Como si fueran trofeos, luego comparten las fotos de sus presas en las redes sociales y sitios web para que otros fanáticos puedan admirarlas. "Se pueden encontrar hasta 15 car spotters en la rotonda Lo Curro en días concurridos, porque ahí pasan autos exclusivos de los que hay solo dos o tres en Chile", explica Nicolás Prat (21), un "loco por los autos", según él mismo se describe, y administrador de la cuenta de Instagram @carspottingchile. La cuenta ya tiene 10.800 seguidores y en ella ha subido más de 3.200 fotos de autos. Según Prat, "Chile es el país con la flota de automóviles más moderna de Sudamérica". Eso lo motiva a querer compartir sus hallazgos y los de sus seguidores con car spotters de otros países donde el movimiento es fuerte, como Perú, Estados Unidos, Brasil, México y algunas zonas de Europa. En grupo o solitarios Prat "caza" en solitario, pero otros car spotters se juntan en grupos, como es el caso del Team Santiago Cars, con cuatro miembros que suben sus hallazgos al Instagram @tsantiagocars. Nicolás Bustorf (24) es uno de ellos. Lleva 10 años junto al grupo, período en el que estas comunidades han aumentado considerablemente, dice. Aunque, agrega, ellos rara vez se relacionan con otros aficionados. Con quienes sí han desarrollado una cercanía es con los representantes de las marcas exclusivas, quienes les permiten fotografiar los autos a cambio de difusión. Al principio, reconoce Bustorf, la relación con los dueños de autos no fue buena: "Se asustaban al vernos, pero con el tiempo hemos llegado a construir una buena relación". Sin embargo, aún hay veces, no poco frecuentes, en que estos cazadores fotográficos se acercan de manera temeraria a su objetivo, arriesgando ser atropellados, asegura. Actitudes como esas no se permiten en otras comunidades más masivas, como la de Francisco Goñi (21), donde enfatizan la importancia de respetar a los dueños de los vehículos. "Fotografío automóviles desde que tengo memoria porque mi padre y mi tío tenían un local de compraventa de autos", cuenta Goñi, quien integra un grupo de 30 personas que se coordinan mediante WhatsApp, para salir los fines de semana a "cazar" autos. Sin embargo, las fotos no son lo único que motiva a estos fanáticos. Mientras esperan horas en la calle que pase algún auto de lujo, debaten sobre cuáles son los mejores modelos en Chile y se lamentan que ver a una mujer entre sus filas todavía es una rareza.
