Los "veredistas", un dolor de cabeza que crece entre los peatones
domingo, 22 de enero de 2017
Francisca Barreda
Nacional
El Mercurio
Mientras los peatones exigen más control, los "Furiosos Ciclistas" admiten que "el espacio que nos corresponde es la calle".
"¡Mira! ¡Estoy embarazada! ¡Cómo no te das cuenta!", gritó Daisy, desde el piso, a un ciclista que la atropelló en la vereda, afuera de su edificio, en el barrio El Golf. "Iba caminando al trabajo, embarazada, con una guata inmensa, y un tipo pasó por el lado, me botó, y ni siquiera se dio vuelta. Tenía seis meses, y me tuvieron que llevar de urgencia a un ginecólogo", relata. Su caso no es único. Según el fundador y vocero de "Peatones Furiosos", Raúl Opazo, ocurre a diario en las calles de Santiago. "El principal problema nuestro es con el ciclista imprudente, que muchas veces es un conductor imprudente, que se sube a la bicicleta y le da miedo pedalear por la calle, pensando que se va a encontrar con un conductor como él", plantea. Según la Encuesta Origen-Destino 2015, cada día en la capital se realizan 747 mil viajes en bicicleta, un 4% de los traslados de un día laboral. César Garrido, vocero de "Furiosos Ciclistas", responde que "nuestra opinión y nuestro trabajo está enfocado en que los ciclistas entiendan que el espacio que nos corresponde es la calle, y no la vereda. Más que ser enemigos de los 'veredistas', somos críticos de ellos y les enseñamos a usar la calle de manera correcta". Derechos y deberes El artículo dos de la Ley de Tránsito designa la acera para uso exclusivo de peatones, y las ciclovías o ciclopistas para el tránsito excepcional de bicicletas o triciclos. La secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito, Gabriela Rosende, afirma que existe un proyecto de ley que además de actualizar la norma, busca hacer más visible el rol de peatones y ciclistas. "Lo importante es que los ciclistas sepan entender que este es un medio de transporte (...), que tienen que convivir con micros, autos y peatones. No deben transitar por la acera, y esa conducta se multa como una falta leve, que puede alcanzar los $23 mil", advierte. Derechos y deberes que no funcionaron en el caso de Karina Huentemilla. Cuando salía de su trabajo, en Irarrázaval con Miguel Claro, fue embestida por un ciclista. "Venía muy rápido, y chocamos de frente", recuerda. "Me fracturó la mano, y me pusieron una placa de titanio y un tornillo, y estuve casi cuatro meses con licencia", recuerda. Para el líder de "Peatones Furiosos", la real solución sería la fiscalización de Carabineros, que en este momento es bastante escasa. Según Opazo, "el tema es que la vereda es el único lugar seguro para el peatón. Y si este espacio es invadido, finalmente, ¿qué va a quedar?".
