Pese a ser un destino europeo de largo linaje, Malta había logrado pasar más o menos "bajo el radar". Pero el año pasado su aeropuerto dio cuenta de que todo cambia: recibió 5 millones de pasajeros, un millón más que en 2015. Seguro que entre los atractivos que sedujeron a los turistas está su buena gastronomía, que, con influencia de los imperios que pasaron por la isla, tiene una rica mezcla de sabores que incluyen toques árabes y grecorromanos. Además, aquí ya se preparan para su próximo momento de notoriedad: Valletta fue nombrada Capital Europea de la Cultura para 2018, título al que le saca lustre con eventos como Ghanafest, dos días de conciertos durante junio de este año.