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En distintas instancias, en reuniones formales e informales con empresarios, economistas y parlamentarios, la autoridad manifestó el retraso que existía en el recorte de la TPM.

Los mensajes que envió el ministro Rodrigo Valdés al ente emisor para que no postergara más la reducción de la TPM

viernes, 20 de enero de 2017

Mariana Penaforte
Economía y Negocios
El Mercurio




El Banco Central finalmente hizo lo que muchos esperaban: bajó la tasa de política monetaria (TPM), por primera vez en 27 meses. Uno de lo más satisfechos es el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés. El cambio le da un respiro, dado que implica un impulso para la debilitada economía chilena.

En los últimos dos meses, Valdés había comentado, en distintas instancias, la necesidad de que el Banco Central bajara la tasa ante el nulo espacio fiscal de Hacienda. Así lo planteó en reuniones formales e informales con empresarios, economistas y parlamentarios. Estos mensajes comenzaron cuando Rodrigo Vergara era presidente del Central, antes de Mario Marcel.

Incluso, en la reciente reunión que tuvo con el comité ejecutivo de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) la semana pasada, el ministro abordó este punto. Según distintos asistentes, al terminar de hablar sobre pensiones, Valdés hizo ver que "no le ayudaba" el retraso del ente emisor en la baja de tasas y que necesitaba el estímulo de la economía por ese lado, dado que no tiene espacio para más gasto fiscal y quiere mantener la responsabilidad en las finanzas públicas. El ministro sostuvo que esto también se lo habría planteado directamente en el Banco Central.

De acuerdo con uno de los asistentes, Valdés señaló que la tardanza en la baja de tasas tuvo algún grado de responsabilidad en el bajón económico. Ante ello, uno de los asistentes respondió al ministro que el Gobierno también debe asumir su grado de responsabilidad en la desaceleración por la incertidumbre generada por las reformas.

La autoridad también advirtió en esa instancia que los primeros dos meses continuarían decepcionando en materia económica. Ello, luego de que los Imacec de octubre y noviembre crecieron -0,4% y 0,8%, respectivamente. Asimismo, las señales que ya se conocen de diciembre no son alentadoras tampoco.

La autoridad también ha tratado el tema en forma pública y en distintas oportunidades ha señalado que la política macroeconómica tiene que reaccionar cuando tiene espacio para hacerlo. En una reciente entrevista con la revista Capital afirmó que no tiene nada en contra "darle un rol a la política fiscal, pero cuando se agota la política monetaria". Afirmó que la interacción monetaria y fiscal no depende del Gobierno ni del Ministerio de Hacienda, sino que del Banco Central, que es autónomo, y que tomará sus decisiones. "El mercado ya anticipa tres recortes de tasas y eso es mayor impulso macroeconómico", dijo.

Derecho a voz

Valdés le habría mencionado diversas veces al banco la necesidad de un recorte. El ministro de Hacienda puede asistir a todas las reuniones de política monetaria del consejo del Banco Central. En estos encuentros, tiene derecho a exponer su posición. Sin embargo, no tiene derecho a voto. Valdés fue gerente de la División Estudios del ente emisor entre 2002 y 2007, por lo que conoce de primera mano el manejo de la política monetaria.

Una de las razones de los insistentes mensajes del ministro en ese sentido es por el nulo espacio fiscal que tiene. Valdés se comprometió a reducir el déficit fiscal estructural en un cuarto de punto cada año y cumplir la regla fiscal, por lo que no puede seguir expandiendo el gasto público.

Las bajas en la tasa, en tanto, lo ayudarían con estímulo directo a la demanda a través de mayor inversión y mayor consumo.

Dentro del consejo, quien concuerda con la visión de Valdés es el economista Pablo García. En la reunión de diciembre, el consejero representó el voto de disidencia y apostó por bajar la tasa ese mes. Ayer, la situación fue claramente distinta. Otro economista que concuerda con esa visión y es cercano a Valdés es José De Gregorio, ex presidente del Banco Central, quien también ha mostrado su visión en ese sentido.

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