Las autoridades de los Emiratos Árabes Unidos prohibieron la posesión de animales salvajes en ese país del Golfo, donde existe la afición de criar leopardos, leones o guepardos como mascotas. La nueva ley prohíbe la venta o posesión de "todas las especies de animales salvajes y domésticos peligrosos". Cualquiera que aparezca en público con algún animal exótico será condenado a una pena de prisión de hasta seis meses y una multa de hasta 500 mil dirhams (130 mil euros).