El Producto Interno Bruto (PIB) de Chile creció un 1,6% en el tercer trimestre, una variación levemente mejor a la esperada, pero que no se desmarca de la débil expansión en lo que va del año ante la contracción de la inversión y deslucidos envíos al exterior.
El PIB entre julio y septiembre, difundido el viernes por el Banco Central, fue mejor al 1,5% que esperaban analistas, y anotó la misma variación tras la revisión al alza del PIB del segundo trimestre.
El organismo informó además que el PIB desestacionalizado del tercer trimestre subió un 0,6%.
El acotado dinamismo de la economía del mayor productor mundial de cobre ha estado marcada por un complejo escenario externo y una débil inversión, en medio de un moderado ritmo del consumo y de otros sectores no mineros.
Con todo, la demanda interna creció un 0,8% interanual en los tres meses a septiembre.
En tanto, la cuenta corriente de la balanza de pagos anotó un déficit de 2.772 millones de dólares, equivalente a 4,5% del PIB trimestral.
Analistas han pronosticado inicialmente para el cuarto trimestre una expansión del PIB de 1,6%.
El Banco Central, en tanto, ha proyectado un aumento del PIB de entre 1,5 y 2,0% para este año.