Un golpe fantástico, de esos que no se olvidan jamás. Palestino desparramó a Flamengo, el conjunto más grande de Brasil, escribiendo el capítulo más glorioso de su acotado derrotero internacional. Y lo hizo con argumentos irrefutables. Los "árabes" dieron vuelta la llave con una alta dosis de fútbol y carácter. Tuvieron paciencia para construir con la pelota y orden para aguantar los embates. Gigante la personalidad para generar un circuito del que nadie se restaba: Mazurek, Torres, Farías, todos la pedían... El "Mengao" quedó tieso cuando Roberto Cereceda embocó de derecha un rebote, tras un tiro libre de Leonardo Valencia. Tambaleó el gigante y Palestino tuvo la sangre fría, esa que se requiere para construir epopeyas: metió un contragolpe vía Valencia y el nacido en Peñaflor clavó un derechazo en el arco del seleccionado Alex Muralha. Con el milagro sobre la mesa, el elenco tricolor creció espiritualmente para resistir el repunte del Rubronegro . Ni el penal de Alan Patrick (falta de Valencia a Pará) asustó a los de La Cisterna, que anoche se encargaron de estampar una proeza inolvidable. ''Terminamos sufriendo un poco, pero en general fuimos superiores. Quizás en Santiago los respetamos mucho".
ROBERTO CERECEDA, defensor de Palestino