Dólar Obs: $ 950,77 | -0,31% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.232,24
IPC: 0,40%
Piezas hechas a la medida son creadas con impresora 3D:

Crean biomaterial para reconstruir huesos idénticos al original y sin rechazo del paciente

jueves, 29 de septiembre de 2016

Paula Leighton N.
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio

El compuesto podría usarse para reparar fracturas y vértebras, hacer reconstrucciones maxiolofaciales y evitar sacar injertos de otras partes del cuerpo o usar piezas metálicas.



Convertir el pabellón de un taller de precisión para fabricar piezas óseas a medida del paciente, es lo que investigadores de la U. de Northwestern (EE.UU.) califican como "el próximo gran logro en ortopedia y cirugía craneofacial y pediátrica".

Esto es lo que se conseguiría gracias al "Hueso Hiperelástico" (o H.B., en inglés), un material con el que se pueden imprimir en 3D huesos sintéticos con características muy similares a las de los originales.

La "tinta" con que se fabrica este hueso artificial se compone principalmente de hidroxiapatita -el principal compuesto mineral de huesos y dientes- y un polímero biocompatible y biodegradable.

Su hiperlasticidad alude a la capacidad del hueso de volver a su forma original luego de torcerlo, comprimirlo o deformarlo.

El avance se publicó ayer en la revista Science Translational Medicine.

En una teleconferencia, su autora principal, Ramille Shah, destacó las potenciales aplicaciones. Estas incluyen reparar vértebras, soldar fracturas, tratar lesiones causadas por deportes, hacer reconstrucción maxilofacial o craneofacial, e intervenir a niños con malformaciones óseas de nacimiento o causadas por traumatismos.

Los investigadores probaron el material en un implante subcutáneo a un ratón para probar la biocompatibilidad, en otro ratón analizaron la formación de hueso haciendo una fusión espinal -procedimiento para soldar dos o más vértebras que habitualmente se hace usando un injerto de hueso de la pelvis o la cadera- y en un macaco rhesus reconstruyeron un segmento dañado de cráneo.

Las pruebas mostraron que el H.B. no genera rechazo en el receptor del implante, se integra rápidamente al tejido circundante, se vasculariza rápidamente y, al poblarlo con células madre, se generan osteoblastos (células que producen huesos).

"El material se degrada y remodela como hueso natural, así que puede crecer con el paciente, lo que evitaría tener que sacar huesos de otras partes del cuerpo para hacer injertos y se elimina la necesidad de futuras cirugías, como ocurre con las placas o implantes metálicos", dijo Shah.

Adam Jakus, otro de los coautores, destacó que al ser 100% sintético, el material "es muy barato y fácil de hacer". Agregó que esperan escalar y probar el material en humanos dentro de unos cinco años.

El doctor Rodrigo Bravo, cirujano maxilofacial de la Clínica Las Condes, señala que los grandes desafíos de la reconstrución ósea son no generar rechazo y lograr la forma apropiada al usar injertos de otros huesos. "Al parecer este material resolvería ambos problemas al usar células madre e imprimir en 3D. Pero hay que esperar los estudios en humanos para ver si se forma cantidad de hueso suficiente y su forma se mantiene en el tiempo", dice el especialista.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia