Quiebre de ministro Díaz con Isabel Allende complica su posible postulación al Senado
domingo, 25 de septiembre de 2016
Carlos Saldivia
Reportajes
El Mercurio
Luego de vencer en las elecciones internas del PS, la noche del 26 de abril de 2015, la senadora Isabel Allende llegó a su comando de campaña para celebrar su triunfo. En la sede, la esperaba para abrazarla el entonces embajador en Argentina, Marcelo Díaz, y varios dirigentes de la corriente Nuestra Revolución, que lidera el hoy ministro. La imagen ha sido comentada extensamente en el "allendismo" en los últimos días. Ello, pues hace tres semanas la presidenta del PS rompió su relación con el vocero de Gobierno y su corriente. El cisma se hizo patente cuando el sector de Grandes Alamedas, que encabeza Allende, consideró como "una traición" que cercanos a Díaz -entre ellos, su jefe de gabinete, Mauricio Bugueño, Danilo Núñez, Mariana Arellano y Freddy Ponce-, adhirieran al texto "El PS frente al Chile de hoy" que elaboró el diputado Osvaldo Andrade, considerado uno de los principales opositores a la mesa directiva. Entre los asesores cercanos a la senadora, como Andrés Santander y Leonardo Jorquera, existe el convencimiento de que Andrade y Díaz están articulando un entendimiento para reemplazar a la legisladora cuando abandone la directiva del partido, y que están lejos de apoyar su candidatura presidencial. Por ello, desde el círculo de la congresista le mostraron su disconformidad a Díaz debido a que tres dirigentes de su corriente -Ponce, Bugueño y Núñez- estarían colaborando con el "trabajo presidencial de Ricardo Lagos" sin notificar a la directiva. La tensión entre Allende y el ministro se acentuó en septiembre. La senadora -en un desayuno con algunos diputados de la colectividad- afirmó que, como partido de la Presidenta, "la hemos acompañado y claramente hemos pagado costos con un solo ministro en el comité político". Ello, explican los socialistas, molestó a Nuestra Revolución y habría motivado en parte la intervención de Díaz en el Consejo General de la tienda, efectuado el 8 de septiembre: "El PS sabrá exigirle cuentas a quienes no estuvieron a la altura de las circunstancias. Prefirieron segundos en televisión (...) tribuna propia a lealtad con el proyecto que encabeza una militante del PS", dijo entonces. Tras esas palabras, señalan en el círculo de Allende, Díaz dejó de asistir a los encuentros de Guardia Vieja (la casa de la senadora) para analizar la coyuntura, en los que solía participar. Incluso, en la mesa del PS aseguran que hoy no existe disposición para conversar sobre las posibles aspiraciones senatoriales del ministro. Frialdad con Aleuy Pero si bien enfrió su relación con la mesa del PS, el vocero mantiene buenos vínculos con actores clave de La Moneda, especialmente con la jefa de gabinete de la Presidenta, Ana Lya Uriarte (PS), a quien conoció hace más de una década, cuando el ministro era parte de la Nueva Izquierda. También con el titular de Interior, Mario Fernández, con quien -a diferencia de Jorge Burgos- ha efectuado pautas conjuntas. Además, Fernández le ha expresado que "él no será un segundo vocero", lo que acomoda a la Segegob. No obstante, según señalan en La Moneda, con el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, mantiene una relación estrictamente "formal". En el pasado, ambos fueron parte de la Nueva Izquierda al interior del PS, pero posteriormente Díaz se alejó de ese sector y estuvo a punto de renunciar al partido en 2012 por diferencias con la mesa que presidía Osvaldo Andrade, entonces también parte de esa corriente. Por lo mismo, a muchos ha sorprendido que hoy Díaz aparezca acercándose nuevamente al diputado. Y por ello también otros en La Moneda sostienen que la relación de Aleuy con Díaz es derechamente fría. En el PS hay además quienes hacen notar la situación del jefe de gabinete del vocero, Mauricio Bugueño. Este formó parte -hasta mediados de 2015- de Sistema Consultores, una empresa ligada al ex ministro de la Segpres, Jorge Insunza (PPD), que es investigada por la Fiscalía de Alta Complejidad Oriente por presuntos delitos económicos y prestación irregular de servicios. De hecho, Bugueño ha ido a declarar en dos oportunidades ante la fiscalía. Su defensa, que lidera el abogado socialista Gonzalo Rodríguez, jefe de la unidad de asesorías de la Subsecretaría de Fuerzas Armadas, confirmó su comparecencia, y que se espera que el caso siga su curso judicial con un bajo perfil. ¿El Senado o el Gabinete? Según explican en el socialismo, hasta la ruptura con Allende, el ministro estaba explorando la posibilidad de un cupo al Senado por Aysén o por Atacama. Sin embargo, tanto el jefe de gabinete de la senadora, Leonardo Jorquera, como el secretario general del PS, Pablo Veloso, habrían trabado las conversaciones, pues Díaz tendría a sus hombres de confianza apoyando a Lagos. No obstante, los cercanos al vocero explican que aún no define su futuro, pues el reciente embarazo de su esposa modifica el escenario, y hoy no estaría "con la mente puesta en una campaña". Así, Díaz evalúa mantenerse como ministro de la Presidenta Bachelet hasta el final del Gobierno. Pero, como él mismo le ha expresado a sus cercanos, posiblemente no como vocero, sino que en otro ministerio. Decisión que tiene como fecha límite el 19 de noviembre, cuando los miembros del Ejecutivo que deseen postular al Congreso deben renunciar a sus cargos.
