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Practicaban un deporte muy similar llamado "mangai":

Los guaraníes inventaron el fútbol

martes, 30 de agosto de 2016

Aldo Schiappacasse
Deportes
El Mercurio

Con el aval del Vaticano y basado en documentos de los jesuitas en el siglo XVII, un documental patrocinado por el gobierno de Paraguay sostiene que el balompié no nació en Inglaterra, sino en las misiones del Chaco. Si es verdad, se tendría que reescribir la historia.



Se jugaba los domingos, después de misa, en los patios de las misiones. "Por lo tanto -asegura el sacerdote Bartomeu Meliá-, la primera tradición básica que imponen los guaraníes del siglo XVII es que el fútbol es un pasatiempo dominguero, cuando la esencia de este deporte ni siquiera existía en Inglaterra".

Los jesuitas, enviados a evangelizar a este pueblo que habitaba en los territorios de Paraguay, Brasil, Bolivia, Argentina y Uruguay, se encontraron con un juego precolombino donde se utilizaba un balón de caucho que era golpeado con los pies, y se encargaron de documentarlo, lo que permite asegurar -con pruebas escritas- que "Los Guaraníes Inventaron el Fútbol", que así se llama el documental realizado por la Secretaría de Cultura paraguaya.

¿Por qué un hallazgo de esta naturaleza se supo recién ahora? Los documentos probatorios fueron recién publicados en 2010 por L'Observatore Romano, en base a las "Cartas Anuas", un reporte anual que se enviaba desde las misiones al Vaticano cada año, desde el siglo diecisiete, en el que se describía el juego, que tenía características especiales. El balón, por ejemplo, que era una bola de arena húmeda cubierta por capas de pulpa de Mangaisí: un árbol muy parecido al caucho; al que los jugadores, para darle diámetro y hacerlo menos pesado, inflaban recurriendo a una bombilla de bambú. De hecho, el deporte toma el nombre del árbol: mangai. Aunque en 1771 el jesuita José Cardiel, en su libro "Las misiones del Paraguay", lo denomina con un nombre más complejo, "manga ñembosarai".

En el "mangai" no había arcos y, por lo tanto, no había goles. El objetivo del juego era que el balón se mantuviera el mayor tiempo posible despegado del suelo, dominándolo con los pies. Y que el adversario se cansara antes que el equipo propio. Según dos crónicas escritas en 1751 y 1777, los enfrentamientos podían durar hasta la caída del sol, cuando se dirimía al ganador contando los jugadores que no habían abandonado. Los reportes históricos revelan, además, que se jugaba con pantalón negro y camisa blanca -el "uniforme" de las misiones-, que en los partidos había público y que, de acuerdo con algunas descripciones, también corrían las apuestas.

Una vez recopilados estos antecedentes se cotejó con el "Tesoro de la lengua guaraní", publicado en 1639 por el sacerdote Antonio Ruiz de Montoya, donde figura el mangai, que es descrito como un juego de pelota, sin agregar más antecedentes, los que serían completados luego por el hallazgo de los documentos históricos. Una vez comprobados todos los testimonios, la Santa Sede se animó a publicar un célebre artículo, titulado, temerariamente, "Cuando los guaraníes inventaron el fútbol" .

"Tenemos un testimonio preciso e inequívoco que nos dice que una actividad singularmente parecida al fútbol moderno existía, no en tiempos remotos, sino con toda probabilidad en el siglo XVII e incluso a mediados del siglo XVIII. ¿Dónde? En Paraguay", decía la nota publicada en 2010. "Los guaraníes de hace tres siglos seguramente ya jugaban al balón con maestría. En el fondo, los paraguayos son los descendientes de los verdaderos inventores del fútbol".

Una idea que al gobierno de Asunción le pareció genial. "Creemos que los ingleses pudieron haber sacado la idea para crear el fútbol después de ver a los guaraníes que fueron llevados a España por los jesuitas, y que pudieron haber demostrado el juego ante la realeza, con la presencia de algún inglés que estaba de visita", dice entusiasmado Máximo Génez, concejal de San Ignacio Guazú, ciudad que pretende ser reconocida como "la cuna del fútbol", ya que ahí estaba ubicada la primera misión jesuita.

De acuerdo con esta teoría, cuando Chile salte al campo del Defensores del Chaco en Asunción, estará enfrentando a los inventores del fútbol.

 LA CIUDAD PARAGUAYA DE SAN IGNACIO GUAZÚ PRETENDE SER RECONOCIDA COMO LA CUNA DEL FÚTBOL MUNDIAL.

EN EL 'MANGAI' (O FÚTBOL GUARANÍ) NO HABÍA ARCOS NI GOLES. EL DESAFÍO ERA MANTENER LA PELOTA LA MAYOR CANTIDAD DE TIEMPO SIN TOCAR EL SUELO.

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