miércoles, 27 de julio de 2016
El Mercurio
Hace tiempo que Apple viene viendo cómo se ralentiza su negocio, y lo de ayer fue la confirmación de lo que los analistas estimaban: los resultados financieros de la firma no serían buenos. En concreto, la compañía informó que, entre abril y junio, sus ganancias cayeron 27%, hasta los US$ 7.800 millones; lo que representa su peor resultado desde junio de 2014. Asimismo, sus ingresos cayeron un 14,6 % en el período, hasta los US$ 42.360 millones, frente a los US$ 49.600 millones del mismo lapso del año anterior. La buena noticia fue que los analistas esperaban un escenario mucho peor, por lo que la acción cayó un ligero 0,69% hasta los US$ 99,67. El principal responsable de la debilidad mostrada por Apple es su producto estrella, el iPhone. Según reportó la compañía, en su último trimestre vendió 40,4 millones de unidades del aparato, un 15% menos que un año atrás.
