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Tras renunciar al patrocinio, José Hinzpeter explica que su otrora defendido comenzó a dudar de la estrategia acordada en abril pasado, de acogerse a la liquidación forzosa y, con ello, saldar las deudas.

Ex abogado de Chang dice que este le quitó el poder para vender bienes y pagar a los acreedores de Onix Capital

domingo, 05 de junio de 2016

Bernardita Aguirre
Economía y Negocios Domingo
El Mercurio




Promesas no cumplidas como el pago de sueldos, finiquitos y deudas previsionales a los trabajadores; las intenciones de cambiar abogados; poderes otorgados que luego fueron revocados; e incluso la negativa a vender propiedades para pagar a los acreedores -como un departamento valorado en unas 35 mil UF ($910 millones)- habrían sido algunos de los cambios de Alberto Chang que hicieron que sus abogados Carlos Castro y José Hinzpeter, quienes estaban a cargo de su defensa penal y comercial, respectivamente, renunciaran a su representación el jueves.

El fundador del grupo Arcano -que es investigado en Chile por estafa, infracción a la Ley General de Bancos y de Mercado de Valores, más lavado de activos- está acusado de engañar a cerca de mil personas a quienes habría defraudado por entre US$ 80 millones y US$ 100 millones.

Hinzpeter cuenta que en abril, cuando viajaron junto a Carlos Castro por cuatro días a conocer a Alberto Chang a Malta -donde él seguiría viviendo hasta esta semana-, acordaron con el otrora emprendedor hacer una liquidación forzosa (antigua quiebra) de Onix Capital, para pagar a los inversionistas y trabajadores perjudicados. Esto, echando mano a los bienes que tenía Chang en Chile a título personal y en todas sus sociedades, y también con las acciones en sociedades en el exterior.

A pesar de que los bienes en Chile estaban incautados, Hinzpeter advierte que se necesitaba la aprobación de Chang para someterlos a la liquidación de Onix Capital, porque estos bienes no eran de esta compañía. Lo mismo con las sociedades en el exterior.

Para eso, Verónica Rajii -con autorización de Alberto Chang- le otorgó a sus ex abogados un poder general sobre todas las sociedades que su hijo manejaba en Chile, de modo de disponer de los bienes. Pero este poder fue revocado el 23 de mayo, por el abogado Rodrigo Mateluna, contratado por Alberto Chang para este fin.

"Él cumplió puntualmente la importante labor de anular los poderes de Hinzpeter & Castro y retornarlos a mi madre para que los entregue a nuestra nueva defensa", dijo Alberto Chang por e-mail a "El Mercurio", sin precisar quiénes serían sus nuevos abogados.

Hinzpeter sostiene que Chang nunca le pidió devolverle el poder, y que se enteró por la notificación por e-mail y notarial del abogado Mateluna de esta decisión de su ex defendido. Además, nunca alcanzó a usar dichos poderes.

La ex defensa sostiene que en la arista comercial del caso se habían allanado a la liquidación forzosa de Onix Capital solicitada por Inversiones Aguasoro, estampada en el 30 juzgado civil de Santiago y en la que hasta esta semana se habían presentado 70 inversionistas, a los que se les adeuda unos $20 mil millones en total. El plazo final para los inversionistas interesados vence el 14 de junio, antes de la junta de acreedores que se realizará el 16 de junio, aunque el convenio de pago de una liquidación forzosa obliga a pagar a todos los acreedores si se cumple un número mínimo.

Hinzpeter reconoce que trabajó con el liquidador Carlos Parada y con los abogados de los principales inversionistas demandantes. Explica que habían cuantificado los bienes en Chile y en el exterior que podrían ser liquidados y que habrían alcanzado para pagar el 50% de los US$ 80 millones que se adeudan. La suma, detallada por el abogado, incluía US$ 5 millones en bienes como propiedades y autos en Chile, y US$ 33 millones en acciones de sociedades en el exterior. Esta última cifra, explica Hinzpeter, no la tiene verificada, sino que se basa en lo que le han dicho los gerentes de las compañías extranjeras donde Chang invirtió.

La estrategia que se había consensuado con Chang consistía en pagar a los acreedores parte de la deuda, de modo de generar una atenuante en la arista penal que enfrenta Chang. Al mostrar reparación del daño causado, podría optar a rebaja ante una eventual pena.

Pero Hinzpeter dice que Alberto Chang en el último tiempo cambió de planes. Cuenta que en sus e-mails comenzó a develar dudas, empezó a sugerir otras opciones, y el abogado sintió que no iba a lograr el convenio de pago. Y sin el poder general para vender los bienes, no tuvo más que hacer.

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