Textil Bellavista Oveja Tomé pide cambiar uso de suelo para construir departamentos
miércoles, 23 de marzo de 2016
FABIÁN ÁLVAREZ
Nacional
El Mercurio
Tras conocer el revuelo generado por la solicitud, el CMN reactivó el expediente en el que el municipio local pide declarar a la fábrica monumento histórico.
Los ojos de los tomecinos están puestos hoy en los 62 mil 258 m2 de avenida Latorre 1133. Allí se emplaza, desde hace 150 años, la fábrica textil Bellavista Oveja Tomé, la postal de esta ciudad costera de Biobío. En enero de 2008, unos 750 obreros quedaron sin trabajo tras el cierre de la empresa, la propiedad la compró el Banco de Chile y los telares volvieron a funcionar bajo la administración del grupo Sabat, los actuales operadores. El negocio no fue el que se esperaba, lo que llevó al dueño a pedir al municipio cambiar el uso de suelo desde industrial a "residencial, comercio y servicio", para construir departamentos y un stripcenter . En la propuesta de modificación del plano regulador de Tomé que Juan Carlos Sabat -por poder del Banco de Chile- presentó al municipio, se precisa que pretende mantener "las fachadas principales y la torre del reloj", dado "el carácter icónico del pasado histórico de Tomé". La textil no cuenta con ninguna protección patrimonial. Según detalla la propuesta, se construirán departamentos de dos y tres dormitorios, y de tipo loft, que estarán dirigidos a "profesionales y emprendedores", y de "ingreso medio-superior". "El proyecto estima construir en 180 mil m2 ", dice el texto, cinco veces más de los 34 mil 474 m2 que hay edificados. La petición ingresó el 22 de enero al municipio y aún la alcaldesa Ivonne Rivas no la informa al concejo municipal, por lo que no se ha iniciado el proceso que incluye la participación de la comunidad. Y si bien la discusión formal no parte, el tema ya agita las aguas entre los tomecinos. Se creó la Mesa Ciudadana por el Patrimonio de Tomé, que reúne a organizaciones civiles, la que se opone al cambio de uso de suelo que propone el grupo Sabat y al proyecto inmobiliario. "No guarda relación con la identidad del sector y el valor patrimonial, y mantener solo la fachada es muy pobre", expresa el vocero Claudio Ramírez. "Esa propuesta es muy pobre", dice también la alcaldesa, pero acota que su decisión de aprobar o no el cambio de uso de suelo será una decisión de la comunidad. El proceso podría tardar un año y medio, dicen en el municipio. En este escenario, el jueves último el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) se hizo presente en Tomé. En 2014, el municipio presentó ante esta institución un expediente en el que pide que se dé protección patrimonial a toda la fábrica, lo que Ivonne Rivas reiteró esta semana ante la secretaria técnica del consejo, Ana Paz Cárdenas. "Bellavista nos dio nuestros años dorados, cuando Tomé estuvo mejor, años en donde nos dimos a conocer en la región, en el país y en el extranjero", dice Rivas. Fue la primera visita en terreno de profesionales del CMN -antes hubo reuniones en Santiago y Concepción- y Ana Paz Cárdenas reconoce que "debido a que ingresó un proyecto (al municipio) de cambio de uso de suelo para este inmueble es que hemos respondido frente a la solicitud de la comunidad". Acota que la preocupación de qué va a pasar con la fábrica no es solo de vecinos o de la alcaldesa, sino también del intendente de Biobío, Rodrigo Díaz, y que viene trabajando "hace bastante rato" con el propietario, pues "estamos preocupados por el posible uso que tenga". Y explica que "nuestro acercamiento con el dueño es justamente en el entendimiento en que él pueda gestionar este patrimonio de la mejor forma posible". Sobre la propuesta de la empresa de mantener la fachada, contenida en la petición de cambio de uso de suelo, Ana Paz Cárdenas explica que "esa alternativa nos la han mostrado recientemente. Pero, no estamos evaluando esa opción, estamos evaluando la protección sobre la fábrica". Este semestre debiera darse la declaratoria, lo más seguro, de monumento histórico al recinto de Tomé, pero el Consejo de Monumentos aún evalúa si esa categoría será para parte de la fábrica o para toda la fábrica. 80% de daños tienen los edificios de la fábrica, según expuso la empresa al municipio. 42 trabajadores tiene hoy la textil. Cuando cerró, hace 8 años, tenía 750 operarios. 180 mil m2 se proponen construir en el proyecto ingresado al municipio, que incluye departamentos y un stripcenter .
