En todas partes las subastas de arte están rompiendo récords. Tanto que Sotheby"s realizó un evento de arte latinoamericano con el que logró reunir más de US$ 13 millones. La gran estrella de la jornada, que reunió obras de arte moderno y contemporáneo, fue "La familia", pintada por el mexicano Rufino Tamayo. La pieza de 124 cm por 180 cm -última y definitiva de Tamayo- alcanzó los US$ 3 millones. Así, superó con creces las estimaciones en torno a su precio, entre US$ 1,2 millones y US$ 1,6 millones. Otros artistas reconocidos de América Latina también lograron destacar, pero no llegaron ni a la mitad. La obra del cubano Wifredo Lam "Les oiseaux violes" se vendió por US$ 1,2 millones; en tanto, "Sin título" del mexicano Alfredo Ramos llegó a US$ 610 mil. En esta oportunidad, también se subastó una obra chilena. Un cuadro del pintor hiperrealista Claudio Bravo, que falleció en 2011, alcanzó los US$ 490 mil, alrededor de $303 millones. "White Package", como se llama la pieza, fue pintada en óleo sobre tela por Bravo en 1969. En 1999, Christie"s ya la había subastado, a un quinto de su valor actual. Cinco de los artistas participantes vendieron sus obras en precios que superan sus récord anteriores.