miércoles, 25 de marzo de 2015
Fernanda Paúl
El Mercurio
Se postula, además, que debe existir un financiamiento público y permanente y que se deben facilitar las donaciones anónimas de personas naturales.
Un documento titulado “Transparencia y Probidad en Partidos Políticos” elaboró Chile Transparente —organismo presidido por el ex ministro José Antonio Viera-Gallo (PS)—, en el que se aborda el marco legal del funcionamiento de distintas colectividades y se revisan los balances financieros de las mismas durante el 2011, último año no electoral del que existen registros.
Según indica el dossier —que estuvo a cargo de los miembros del equipo ejecutivo de la ONG, Alberto Precht y Jeannette Wolfersdorff—, el Partido Socialista es el que cuenta con un mayor ingreso mensual promedio, de $60 millones. Luego sigue la UDI, con 51 millones. Más abajo figura el Partido Comunista, con 19 millones, y tras él el PPD, con 15 millones. La DC y RN recibieron nueve y cinco millones, respectivamente, mientras que el resto de los partidos no superó el millón promedio mensual.
Ante este resultado, el estudio señala que los partidos deberían recibir financiamiento público y permanente que les asegure su funcionamiento.
Aportes anónimos y reservados
Además, se indica que al analizar estos ingresos “cobran una alta importancia las cotizaciones de afiliados, así como las donaciones reservadas o anónimas, aparte de los ingresos provenientes de inversiones que unos pocos partidos sostienen”.
Las donaciones más importantes —señala el documento— son las de carácter reservado, que están repartidas de forma “desigual”. Según cifras del estudio, desde 2004 hasta el 2013 fue la UDI la colectividad que contó con el mayor aporte de este tipo, llegando a un total de 12.166 millones. Luego figura RN, con 5.118 millones en aportes reservados, y la DC, con 3.145 millones. El PS, en tanto, recibió en esos años 1.906 millones, el PPD 1.125 y el Partido Radical 491 millones. El PRO, por su parte, obtuvo 101 millones en este tipo de ingresos.
En cuanto a los aportes anónimos, el informe afirma que durante esos mismos años (2004 a 2013) el PRO fue el partido que llevó la delantera, con un total de 172,37 millones. Le siguen el PRI, con 94,73; el PC, con 66,71; el Partido Igualdad (PI), con 47,13; y luego la DC, con un aporte de 41,13 millones. El PS y la UDI obtuvieron 16,37 y 15,76 millones, respectivamente, mientras que RN 2,40 y el PPD, 1,44.
El problema con este financiamiento —dice el documento— es que, en la práctica, los partidos “sí conocen la identidad de sus grandes aportantes”. Es así como se propone que el sistema de financiamiento debería tener como objetivo la “diversificación de las fuentes de ingresos” y que ninguna sea mayoritaria, incluyendo el financiamiento público. Se plantea, entonces, la eliminación de las donaciones reservadas, al tiempo de incentivar las donaciones públicas y anónimas de personas naturales, y establecer un control eficaz de estas.
“Consideramos importante mantener y hasta facilitar las donaciones anónimas. Sugerimos que el monto de tope debería ser más alto que las 20 UF establecidas actualmente”, dice.
En tanto, para que exista mayor transparencia, el dossier propone una serie de medidas que elevarían estos estándares; entre ellas, la publicación de los activos y pasivos de cada partido, o especificar las inversiones que el partido mantenga en empresas, instrumentos financieros o inmuebles, e informar sobre los rubros y regiones en los cuales el partido invierte.
