La dificultad, dice Jacial, está en que ninguna empresa financiera ha querido ser parte de los auspiciadores de Belfort, un ex corredor condenado por fraude y que aún no termina de restituir los US$ 100 millones que la justicia le ordenó pagar a sus víctimas.
“Con el caso Cascada está claro que las empresas financieras no van a querer alinearse y asociarse a esta charla, pero en ningún momento pensamos en depender de los sponsors”, dice Jacial.
Hoy la venida de Belfort ha sido financiada casi completamente por inversionistas, quienes también han costeado a los otros speakers que hablarán en una serie de charlas “cascada”, que es como se conoce esta modalidad de seminarios.