Visas para trabajar en Chile pueden costar casi US$1.000 y trámites se duplican en 7 años

lunes, 05 de julio de 2010

Carolina Ubilla y Fernanda Valdés
Economía y Negocios

Un peruano paga US$80 por una visa temporal sujeta a contrato de trabajo. Un inglés paga casi US$1.000.

Cada vez más extranjeros miran a Chile como un buen país para trabajar y vivir. En 2003, los permisos temporales otorgados por el Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior no alcanzaron los 30 mil, mientras que en 2009 superaron los 57 mil. Y la mitad de ellos corresponden a visas temporales sujetas a contratos de trabajo.

Pero llegar a vivir a Chile no es tan fácil, pues tramitar los permisos puede tener un alto costo para el inmigrante.

Un ecuatoriano que solicita una visa temporaria debe pagar por ella US$350, y si la visa está sujeta a contrato de trabajo el costo es de US$ 150. El médico Carlos Moscol es ecuatoriano y trabaja en un consultorio de Pudahuel. Él cree que el costo de la visa "es bastante significativo, sobre todo si se viene de un país donde todo es más barato que en Chile". Por eso, opina que el precio debería adecuarse a la realidad económica de cada país.

Mucho menos pagó Favio Junior, quien llegó desde Perú el año pasado y cuya visa temporal le costó cerca de US$55. Pese a ello, reconoce que para algunas personas puede resultar caro. "En mi caso podía pagarla, pero no todos pueden y es un costo alto", dice.

Sin embargo, los ecuatorianos y peruanos no son los extranjeros que pagan los precios más altos por obtener una visa sujeta a contrato de trabajo. Los estadounidenses tienen que cancelar US$520 y los ingleses US$931.

¿Por qué la diferencia de precios?
La Dirección de Política Consular del Ministerio de Relaciones Exteriores explica que el valor de la visa lo determina el Departamento de Inmigración, que depende de ese mismo ministerio, y que "el arancel que se cobra se fija por estricta reciprocidad, esto corresponde a lo que en cada país le cobran a un chileno por el mismo tipo de visa".

Sin embargo, hay casos en que las tarifas no coinciden. Es lo que ocurre, entre otros, con Argentina. Según el cuadro de visaciones 2010 del Ministerio de Relaciones Exteriores, un ciudadano argentino que solicita el permiso para venir a Chile con contrato de trabajo tiene que pagar US$179. Un chileno que va a Argentina en iguales condiciones tiene que pagar US$100 por la visa más una tasa de US$150 al llegar a ese país. En total, US$250.

El ex canciller Mariano Fernández señala que no es obligatorio que los derechos que se cobran en Chile para que un extranjero entre sean los mismos que se exigen a los chilenos por ingresar a ese país. "La reciprocidad es un tema selectivo que no se aplica automáticamente en todos los casos de relaciones de Chile con otros países", dice.

Fernández agrega que "Chile tiene interés en una inmigración de carácter profesional, y en algunos casos facilita la entrada de profesionales al país (...) La reciprocidad depende de las políticas internas económicas, comerciales, sociales y laborales que se tengan".

Destinos de moda para los jóvenes

Australia y Nueva Zelandia son destinos recurrentes entre jóvenes chilenos para ir a trabajar. La visa de trabajo cuesta US$228 y permite estar en dicho país un año. En cambio, los australianos que vienen a Chile pagan una tasa de ingreso por reciprocidad de US$95. Para los que vienen con contrato de trabajo cuesta US$240.

En el caso de Nueva Zelandia, debido al convenio Working Holiday , quienes tramiten la visa bajo esos criterios sólo deberán cancelar US$37. Para los trabajadores corrientes, la tarifa es de US$200.

Los turistas de ese país que quieren ingresar a Chile deben pagar US$86; y si tienen contrato de trabajo, US$133.



¿Eximirse de la visa? Opción en la APEC

Los empresarios que viajan regularmente por la región a los países miembro del Foro de Cooperación del Asia Pacífico (APEC) tienen una opción para olvidarse de la visa. Se trata de la Apec Bussiness Travel Card (ABTC), una tarjeta que les permite ingresar sin problemas a las zonas Apec -dentro de las que se encuentra Chile-, ya que el documento hace las veces de "visa universal". El solicitante debe entregar sus datos a las Asociaciones Empresariales para que ellos certifiquen si es una persona de negocios, y el trámite cuesta US$100. Sólo Estados Unidos, Canadá y Rusia no participan de este beneficio.

Según cifras aportadas por la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), a la fecha son 347 los chilenos que tienen la tarjeta vigente.



Visas turísticas

Salvo excepciones, la mayoría de los países no requieren visa para venir a Chile. Lo mismo ocurre cuando son los chilenos los que van como turistas a otros países.

Algunos de los países que sí requieren visa son China, Cuba y Estados Unidos. Ello ocurre porque no existe convenio bilateral de exención de visa con esas naciones.

En el caso de EE.UU., los norteamericanos no necesitan visa para venir como turistas a Chile, pero al llegar al aeropuerto se les cobra un derecho de US$140, el mismo valor que ellos nos cobran por la visa que nos exigen para pisar su suelo. Este costo ha variado en el último tiempo. Hasta el 4 de junio pasado, el valor de la visa era de US$131 y en 1998 era de US$45. "El incremento corresponde a lo que el FBI nos cobra por hacer un chequeo de las huellas digitales al 100% de los solicitantes. Desde el 11 de septiembre del 2001, EE.UU. ha hecho muchos cambios en seguridad", afirmó Christian Bendsen, cónsul general de EE.UU. en Chile.