A unos 80 kilómetros de Punta Arenas:

Identifican población de huemules en el oeste de la isla Riesco, en Magallanes

lunes, 29 de octubre de 2018

Richard García

Aunque investigadores avistaron solo cinco individuos, pueden haber más. Se trata de una buena noticia, ya que en Chile apenas hay unos dos mil en total. Hasta ahora, las referencias de la presencia del animal en la zona eran muy vagas.


Uno de los mayores tesoros de la isla Riesco son sus huemules. Hasta ahora, solo se conocían vagas referencias a través de un puñado de publicaciones científicas, aunque desde 2003 no se sabía si todavía quedaban en ese territorio, en su mayoría despoblado, ubicado a unos 80 kilómetros de Punta Arenas, en la Región de Magallanes.

Pero a través de una investigación en terreno y un documental realizado con fondos regionales por la ONG Asociación Kauyeken, este mes se constató su presencia y estado de conservación. "En solo ocho días logramos observar cinco individuos, lo que es un número importante si se considera que en Chile no viven más de dos mil", destaca Diego Peñaranda, biólogo del Laboratorio de Conservación de la U. de Chile. Junto a investigadores del Buin Zoo e integrantes de Kauyeken realizaron un monitoreo preliminar en un entorno de 8 kilómetros en el área que fue propiedad de Douglas Tompkins y que fue donada al Estado para formar parte del nuevo Parque Nacional Alacalufes, que incluye prácticamente la mitad de la isla.

La expedición llegó a Riesco el miércoles 3 y los primeros individuos los encontraron el sábado 6, especialmente en la costa y laderas montañosas. "Los primeros que observamos -una hembra y una cría- arrancaron porque nos vieron antes, pero al siguiente fotografiamos y filmamos uno. Estaba echado en la parte alta de una ladera y a veces se paraba y nos observaba mientras caminábamos. Solo se movió cuando estábamos a unos 40 metros".

Al día siguiente, en una zona más alejada vieron otro macho con otra hembra.

En esa misma zona observaron también indicios de los frotes que estos animales hacen en los árboles cuando cambian la gamuza que adorna su cornamenta. "El que vimos la tenía entera, lo que hace pensar que debe haber otro macho por ahí".

"Que existan crías es muy bueno porque significa que hay una población reproductiva", dice el médico y ganadero de la zona Gregor Stipicic, quien participó en la expedición como representante de Kauyeken. "El hecho de haber observado estos animales tan cerca de las zonas más pobladas podría implicar que en los valles altos podría haber muchos huemules más".

Al parecer no tienen problemas sanitarios ni ha llegado hasta allá el quiste que afecta a poblaciones más al norte. "La apariencia, el tamaño, el pelaje y la estructura corporal sugieren que se encuentran en buen estado de salud y alimentación", destaca Peñaranda.

Sin embargo, no deja de ser una población frágil. "Como están en una isla se trata de una población cerrada y con poco flujo genético. De hecho, podrían ser genéticamente distintos a los del continente", indica.

Si bien estas poblaciones están bastante alejadas de la controvertida mina Invierno, que explotará carbón a tajo abierto, a los especialistas les preocupa que la materialización futura de proyectos de otras minas semejantes más cerca del área protegida ponga en riesgo a los huemules, cuya capacidad de dispersión por la isla se desconoce.

"El proyecto de investigación del huemul tiene que ver con poner en valor el territorio y la biodiversidad y no está en contra de algún tipo de desarrollo", aclara Gabriela Simonetti, directora ejecutiva de Kauyeken.