Transantiago: operadores han recibido US$ 7 mil millones en nueve años de operación

miércoles, 10 de febrero de 2016

Manuel Valencia
El Mercurio

Aunque el costo promedio de un viaje creció 92% entre 2007 y 2015, principalmente por mejoras a buses, especialistas prevén que el sistema requerirá un cuarto subsidio para estabilizarse en el corto plazo.

Hoy se cumplen nueve años desde el llamado big bang de Santiago, el día en que las micros amarillas eran reemplazadas por los modernos buses del Transantiago, en una caótica jornada. En lugar de convertirse en un motivo de celebración para la capital, el debut del tan anticipado sistema de transporte público se dio en medio de buses repletos, pasajeros indignados que no entendían sus nuevos recorridos, cargados de transbordos, servicios que no pasaban, atrasos, protestas y, en el corto plazo, una crisis política para el primer gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.

En casi una década, el pasaje del Transantiago aumentó considerablemente de precio (pasó de costar $380 en 2007 a $640 hoy) y se duplicó la evasión (de 13,5% a 26,9% el año pasado).

En medio de todo, el sistema transitó del objetivo de autofinanciarse a aprobar tres leyes de subsidios que significarán hacia 2022 recursos por US$ 16 mil millones. De esos recursos, ya se han entregado cerca de US$ 3.500 millones dentro de los US$ 7.065 millones que han recibido por los operadores (la otra mitad por ingresos tarifarios) entre 2007 y 2015, según lo establece un análisis realizado por la fundación Transurbano, conformada por especialistas y algunos operadores de buses. Esos recursos superan el costo anual estimado para la gratuidad universal en Educación (US$ 5.000 millones). Equivale, además, a dos reconstrucciones de 27-F (costó cerca de US$ 3.000 millones), cuatro líneas de metro (las líneas 3 y 6 juntas están avaluadas en cerca de US$ 3.000 millones).

"Desde su inicio, el sistema carece de un modelo regulatorio y planificación de largo plazo, que considere inversiones para sustentar mejoras en el nivel y calidad del servicio", explica Víctor Barrueto, director ejecutivo de la fundación Transurbano.

De acuerdo con el estudio, entre 2008 (primer año completo comparable, porque en 2007 Transantiago operó desde febrero) y 2015, el pago del Estado a los operadores aumentó en US$ 235 millones. Así, si en 2008 se pagaban US$ 688 millones a las empresas de buses, la cifra llegó a US$ 923 millones el año pasado. Con ello, la tarifa promedio subió sus costos en 92% y pasó de $375 a $720 (92% más).

Según el análisis de Transurbano, esta alza se origina en el aumento de costos, principalmente por aumento de buses, cambios de flota y nuevos kilómetros recorridos (50%), además del incremento de costos en insumos como el petróleo o la mano de obra y el dólar, que representan un 33% del alza.

Pese a estos aumentos, el ministro (s) Cristián Bowen dice que el nuevo Transantiago, que se licitará en 2017 (ver nota relacionada), se diseñará sin recursos adicionales. "Los subsidios actuales financian el sistema de transporte. Queremos que en las próximas licitaciones se gane en eficiencia, con mayores niveles de servicio y así reducir costos".

Distinto piensa el ex ministro de Transportes Pedro Pablo Errázuriz. A su juicio, el monto actual debe incrementarse. "Para que una ciudad compleja funcione, es esencial un sistema de buena calidad. En el caso de Santiago, eso significa muchas transformaciones, como derecho a vías con más fuerza para transporte público, más pistas con cámaras, corredores amigables con la ciudad, más infraestructura, buses que se renueven en plazos menores, cada cinco años y una mayor cobertura de metro. Esas inversiones no están en los montos considerados. Si se piensa en inversión, el subsidio no alcanza, porque está pensado para la operación. Además, con una evasión tan grande puede ser que amerite aumentar el monto".

Concuerda el especialista del CEP Slaven Razmilic: "de aquí a la renegociación de contratos no hay razones para prever que el subsidio requerido pueda disminuir. La evasión difícilmente se reducirá. Las tarifas, especialmente, en período electoral no se ajustarán. Y los costos de mantención seguirán creciendo. Mientras el subsidio sea la única variable de ajuste, siempre habrá presión para aumentarlo".

Pasajes
El precio medio por viaje pasó de $375,46 en 2007 a $720,77 en 2015, según el estudio.